martes, 21 de septiembre de 2010

LA INFANTA ELENA, POR DECIR ALGO.

El otro día estaba ojeando los periódicos vía Internet cuando de repente "SORPRESA", la susodicha persona ni corta ni perezosa mando a un guardaespaldas de los que tiene y que creo recordar le pagamos todos a que no le hicieran o grabaran en vídeo, a ella y su hija, hasta aquí una incongruencia mas de la Infanta. Porque vayamos por partes, de que se las quiere dar, de que lo hace por derecho a la intimidad,sera broma supongo que utilice esa prerrogativa cuando es ella la que a hecho que no sea posible dicha consideración, enseñando a su familia cuando le a interesado, valgase en revistas del corazón o sin corazón.
Le quiero recordar a dicha INFANTA que es publica por donde quiera que lo mire, es la hija de un rey que no a sido votado para tal menester, pero que esta como tal, que gracias a todos los ciudadanos de este país vive gratis de todos los lujos que le rodea, que si fuera por su sueldo mensual no llegaría ni al día 5 de cada mes, por lo tanto se debe a todos nosotros, le guste o no le guste, este es el coste que debe pagar, que como comprendera es el mínimo. Siempre le quedara el poder rechazar toda la parafernalia que le rodea. Que al menos aprenda de sus padres como se deben hacer las cosas, es lo mínimo que nos debe, no es gran cosa por otra parte, ni requiere grandes esfuerzos.
Puede empezar por sacarse de encima los coches oficiales, la guardia pretoriana que le acompaña, no se si hasta el lavabo, la utilización del nombre de INFANTA y convertirse en una ciudadana mas de este país, sin privilegios de ningún tipo, si así no lo hace, y si no se desprende de todo ello pues solo le queda aquello tan socorrido de AJO Y AGUA, y aguantar todo lo que te echen. Atte un republicano